viernes, 24 de agosto de 2012

270 páginas relatando y viendo la Cultura del Vino


Tengo una teoría: el vino enturbia todo aquello de lo que quiere ser protagonista. Quiero decir, que si una botella ocupa un lugar destacado en un relato se nota algo exagerado y el resultado suena snob, lejos de la realidad, como si estorbara. Por eso valoro mucho este libro que llegó a mis manos recién traído de Europa: se trata de una rara obra en la que el ilustrador Étienne Davodeau explora el mundo del vino en una autobiogrfía gráfica, sin entrar en esas exageraciones.
La propuesta es simple y ambiciosa. Dispuesto a aprender de vinos, Étienne hace un acuerdo con Richard Leroy, un apasionado viticultor del bajo Loire, donde se producen los blancos de Anjou: trabajará un año en el proceso de elaboración de vinos y a cambio él le enseñará los trucos de los comics. Y lo que parece una idea alocada, termina siendo una novela gráfica de luminosa sensibilidad y lograda perspectiva sobre los oficios humanos.

El viaje dura 270 páginas entre las cuáles nos llevan de los talleres de imprenta a los viñedos de Montbenault, de la historia del comic al wine business, pasando por la geología y el terroir del Loire, las labranzas culturales del viñedo y los trabajos de bodega, pero también al oficio de dibujante, sus secretos y algunos de los libros y autores clásicos. En cada una de las paradas, el autor logra descifrar con humanidad los dilemas de los personajes, sus gracias y fobias, también sus pasiones y misterios, sin que el vino o el comic dejen de estar presentes como un rompecabezas que se completa página a página. Esa es la maestría de este relato, que prueba de paso mi teoría.
Parte de un avanzada en el mundo editorial en la que la historieta dejó de ser de humor para pasar a ser un campo de exploración de lenguajes y temas –como nos lo explicó el gran Liniers en esta entrevista que le hicimos en Vorterix-, Los Ignorantes es una propuesta novedosa que vale la pena pegarle el ojo. El conocedor de comic –cosa que no soy- encontrará innumerables citas a obras del género, mientras que el amante del vino hallará una perspectiva nueva para los viejos temas sobre los que damos vuelta los cronistas. Y al final, cuando se llega a la última página del libro, uno cae en la cuenta de que se ha cumplido cabalmente el subtítulo de esta novela gráfica: “relato de una iniciación cruzada” de la que como lectores también somos parte.
Ilustrada con fino talento –en eso Davodeau parece ser una garantía, con una basta bibliografía detrás- es un hermoso libro que acercará dos lindo oficios al lector y los reunirá entre sus tapas duras y buena presentación. Ampliamente recomendable, en español lo editó La Cúpula y se consigue en Amazon a 26 euros.

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