 |
| Esta es la mesa de la comida de Navidad de mi Familia |
Con el
menú listo para su cena o comida de Navidad, el siguiente paso para este dia especial e inolvidable es elegir el vino
adecuado, para ello le damos las siguientes opciones:
Comenzamos
con el aperitivo: La finalidad de esta bebida es ir
preparando al comensal para el posterior disfrute de la comida que se servirá.
Por lo tanto es preferible servir vinos blancos o un espumoso seco acompañado
con entremeses como: quesos, vegetales secos cortados en forma de palitos
acompañados de una crema ligera. Los aperitivos se sirven de preferencia en la
sala, antes de pasar al comedor para la cena. Aquí si me permite le suguiero un
VERMUT casero ya sea blanco dulce o
seco o como decimos en Cataluña “Negre. También el maridaje puede ser vertical
es decir todo con un mismo vino en este caso le recomiendo un Cava Brut no entro en marcas.
Vino
para el almuerzo cena o resopón:
Vinos
espumosos secos: Además de servirse con los
aperitivos, acompañan perfectamente a los mariscos crudos o cocidos, ensaladas
a base de mariscos y pescados hervidos, verduras, pastas y arroz con salsas
delicadas. Aquí propongo un Castillo de
Perelada Seco
Vinos
blancos secos y con sabor a frutas:
Excelentes sustitutos de los vinos espumosos, que de igual manera armonizan muy
bien con los mariscos crudos, pescados hervidos, verduras, pastas y arroz con
salsas delicadas. Ya que estoy en Cabrils cerca de Aleya recomiendo un Marfil un vino seguro con una
trayectoria de más de Cien años
Vinos
blancos aromáticos y añejos: Son ideales para acompañar las pastas
y los arroces con salsas aromatizadas, las verduras o los champiñones, los
huesos, el pescado preparado al horno o guisado y los quesos de cabra frescos. Aquí
en mi familia todas la Navidades mi abuelo apostaba por Extrisimo Bach del penadés y hasta ahora después de tres
generaciones este vino no falta en la mesa de Navidad. De paladar suave y
ligeramente dulce ha marcado toda una época. Su aroma a frutas, cálido y de
suave paladar ha sido potenciado en barrica de Roble y redondeado en botella.
Vinos
blancos añejados en barriles: Son
vinos que tiene un delicioso sabor y olor; se sirven con paté, aves, pescados como
la trucha y el pez espada, así como los preparados a la parrilla Casa Santa
Eufemia Oporto reserva especial blanco En boca revela una armonía perfecta
entre el alcohol y la acidez con un final largo y persistente.
Vinos
rosados de sabor delicado: Se sirven con jamón crudo,
salchichones, mortadelas, etc. Con la pasta rellena o gratinada; aves y carnes
blancas con salsas aromatizadas, trufas y quesos frescos. Vayamos al país vecino
y te recomiendo Matheus con su capa brillante, un vino fresco, suave y
afrutado gracias a su boca ligeramente espumosa
Vinos
tintos, jóvenes y frescos: Los mejores para acompañar a los
frijoles (caraotas, habichuelas, judías secas), sopas cocidas con legumbres,
sopa de cebolla; carnes blancas guisadas, las carnes rojas asadas, los pescados
grasos, las sopas de pescado bien condimentadas y con los quesos semi añejados.
En este caso un crianza como el Clos i Terrasses de Closs Erasmus 2008
Vinos
tintos añejados: Ideales para acompañar a las carnes
rojas, el cerdo preparado en salsa, los asados, y los quesos de sabor fuerte. Aquí
hay muchas alternativas, pero en una apuesta muy subjetiva, ya que mi Barca del
vino es el Ribera del Duero apostaría por un pesquera Gran reserva Magnum
Vinos
espumosos, dulces o aromáticos:
Perfectos compañeros de los dulces ligeros, así como de los pasteles, las
ensaladas de frutas y los mousses. Emblemático de Codorníu Anna de Codorniu.
Comenzamos
con el aperitivo: La finalidad de esta bebida es ir
preparando al comensal para el posterior disfrute de la comida que se servirá.
Por lo tanto es preferible servir vinos blancos o un espumoso seco acompañado
con entremeses como: quesos, vegetales secos cortados en forma de palitos
acompañados de una crema ligera. Los aperitivos se sirven de preferencia en la
sala, antes de pasar al comedor para la cena. Aquí si me permite le suguiero un
VERMUT casero ya sea blanco dulce o
seco o como decimos en Cataluña “Negre. También el maridaje puede ser vertical
es decir todo con un mismo vino en este caso le recomiendo un Cava Brut no entro en marcas.
Vino
para el almuerzo cena o resopón:
Vinos
espumosos secos: Además de servirse con los
aperitivos, acompañan perfectamente a los mariscos crudos o cocidos, ensaladas
a base de mariscos y pescados hervidos, verduras, pastas y arroz con salsas
delicadas. Aquí propongo un Castillo de
Perelada Seco
Vinos
blancos secos y con sabor a frutas:
Excelentes sustitutos de los vinos espumosos, que de igual manera armonizan muy
bien con los mariscos crudos, pescados hervidos, verduras, pastas y arroz con
salsas delicadas. Ya que estoy en Cabrils cerca de Aleya recomiendo un Marfil un vino seguro con una
trayectoria de más de Cien años
Vinos
blancos aromáticos y añejos: Son ideales para acompañar las pastas
y los arroces con salsas aromatizadas, las verduras o los champiñones, los
huesos, el pescado preparado al horno o guisado y los quesos de cabra frescos. Aquí
en mi familia todas la Navidades mi abuelo apostaba por Extrisimo Bach del penadés y hasta ahora después de tres
generaciones este vino no falta en la mesa de Navidad. De paladar suave y
ligeramente dulce ha marcado toda una época. Su aroma a frutas, cálido y de
suave paladar ha sido potenciado en barrica de Roble y redondeado en botella.
Vinos
blancos añejados en barriles: Son
vinos que tiene un delicioso sabor y olor; se sirven con paté, aves, pescados como
la trucha y el pez espada, así como los preparados a la parrilla Casa Santa
Eufemia Oporto reserva especial blanco En boca revela una armonía perfecta
entre el alcohol y la acidez con un final largo y persistente.
Vinos
rosados de sabor delicado: Se sirven con jamón crudo,
salchichones, mortadelas, etc. Con la pasta rellena o gratinada; aves y carnes
blancas con salsas aromatizadas, trufas y quesos frescos. Vayamos al país vecino
y te recomiendo Matheus con su capa brillante, un vino fresco, suave y
afrutado gracias a su boca ligeramente espumosa
Vinos
tintos, jóvenes y frescos: Los mejores para acompañar a los
frijoles (caraotas, habichuelas, judías secas), sopas cocidas con legumbres,
sopa de cebolla; carnes blancas guisadas, las carnes rojas asadas, los pescados
grasos, las sopas de pescado bien condimentadas y con los quesos semi añejados.
En este caso un crianza como el Clos i Terrasses de Closs Erasmus 2008
Vinos
tintos añejados: Ideales para acompañar a las carnes
rojas, el cerdo preparado en salsa, los asados, y los quesos de sabor fuerte. Aquí
hay muchas alternativas, pero en una apuesta muy subjetiva, ya que mi Barca del
vino es el Ribera del Duero apostaría por un pesquera Gran reserva Magnum
Vinos
espumosos, dulces o aromáticos:
Perfectos compañeros de los dulces ligeros, así como de los pasteles, las
ensaladas de frutas y los mousses. Emblemático de Codorníu Anna de Codorniu.
No hay comentarios:
Publicar un comentario